Queratoplastias Lamelares
La cornea representa el tejido más anterior del ojo y cumple una función trascendental para la visión. La cornea es transparente, lo cual permite la entrada de luz al ojo, y además funciona como una potente lente que concentra dichos rayos de luz en la retina.
El trasplante de córnea (queratoplastia) representa un procedimiento quirúrgico que permite tratar infinidad de patologías oculares en las cuales la córnea ha perdido su transparencia o se ha alterado su forma. Existen en la actualidad diferentes tipos de trasplantes corneales de acuerdo a las necesidades específicas de cada patología, pudiendo reemplazar la totalidad de la córnea (trasplante penetrante) o bien reemplazar únicamente las capas que se han afectado (trasplante lamelar).
Si bien los trasplantes corneales se realizan desde hace más de un siglo, en los últimos años se ha perfeccionado el uso de técnicas lamelares que permiten conservar porciones de tejido corneal sano del huésped, disminuyendo de esta forma las tasas de rechazos y mejorando los resultados postoperatorios.
¿Qué significa que un trasplante corneal sea lamelar? ¿Qué diferencia hay con un trasplante total?
El trasplante corneal total (queratoplastia penetrante) indica el reemplazo completo de todas las capas de la córnea. Por el otro lado, el trasplante lamelar permite reemplazar solamente las capas afectadas de la córnea, preservando aquellas otras capas que están funcionalmente intactas.
Existen a su vez distintos tipos de trasplantes corneales lamelares. En la queratoplastia lamelar anterior profunda se reemplaza el epitelio, membrana de Bowman y estroma corneal, los cuales representan más del 95% del espesor total de la córnea. En el caso de los trasplantes endoteliales, se reemplaza principalmente el endotelio y la membrana de Descemet.